octubre 27, 2010

Cartas de la señorita azul en su viaje a ninguna parte y lo que se encontró al abrir el estuche de guitarra enterrado al pie de la carretera.

Me encuentro sentada sobre mi maleta frente a un viejo establecimiento de café. Creo que no hay nada más alrededor, solo alcanzo a ver tierra y el viento que la levanta. A pocos metro de mí, hay una desgastada carretera que no se a donde me llevará. Dejaré que el corazón me guíe.
Recuerdo que caminaba de la mano de alguien a quien llamaré El Malnacido, y de pronto perdí el sentido del movimiento y todo sucedió tan rápido como un mal sueño y cuando abrí los ojos ya me encontraba aquí, en Ninguna Parte, después creí verlo y lo perseguí. Solo conseguí dar vueltas sobre mí misma y desorientarme más, me senté sobre mi viejo baúl de viaje y comenzé a escribir.
Sí, he llegado a esa parte de la vida en la que te detienes porque te das cuenta de que no sabes hacia donde te dirijes ni donde carajos estás.
Como un pequeño barco a la deriva. Y así, partiendo de la nada, de un lugar desértico, comienza mi aventura hacia ninguna parte, donde encontraré lo que he perdido al llegar aquí...
O tal vez no...o nunca lo sepa, pero estoy segura que cuando llegue, si es que he de llegar a alguna parte lo sabré.
Mientras tanto, estoy perdida, han soltado mi mano después de confundirme y me abandonaron aquí sin saber a donde ir...¡Aguarda! Creo que se aproxima un Aragonés Errante, tal vez el me pueda ayudar...


Espero que llegue a tus manos y que no la devuelvas.

2 comentarios:

  1. *La mayoría de los nombres que aquí aparecen son propiedad de mi padre.

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  2. Me pregunto si es el malnacido el que cambia tu vida, eres tu misma, o es el destinoo??... mmm quizas la carretera...

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